viver isart

Nosotros

Empresa familiar fundada el año 1923

Nosotros

El Viver Isart ha querido atender a sus clientes de una manera personalizada. Quieren darles una respuesta a sus necesidades con plantas apropiadas para su jardín, y que al mismo tiempo les gusten. Pensando que el cliente no debe serlo de manera puntual, sino que queremos que vuelva.

También priorizamos que las plantas no sean forzadas, ni en su crecimiento ni en el momento de la floración. Es por eso que lo importante no es el aspecto de la planta, sino la respuesta que da cuando se planta en el lugar definitivo.

Actualmente, se han incorporado nuevas especies que han venido de lugares con clima mediterráneo como el nuestro. Pero en planta vivaz, hemos mantenido especies que se consideraban poco comerciales. Bien adaptadas a nuestros jardines ya que se cultivan desde hace muchos años. Son plantas de siempre, y al mismo tiempo plantas con futuro, ya que son las que mejor resisten nuestro clima.

Creemos, por lo tanto, que es necesario diversificar las especies de un jardín, y aunque haya una floración puntual, puede complementarse con otras y dar más personalidad al conjunto.

Nuestra História

Negocio familiar con tradición desde el año 1923. Creado por el Sr. Joan Isart, el primer vivero se construyó en la zona de Les Corts (cerca de la Diagonal). En este terreno, no muy grande, se dedicó al cultivo de plantas para el arte topiario (plantas de recorte) y mosaicultura, muy de moda en aquellos tiempos. Aunque había otras, principalmente se cultivaba Punchillo (Euonymus Plchellus) y Espernallacs (Santolina Chamaecyparisus), que eran las plantas más utilizadas.

En el año 1926 se trasladó el vivero al barrio de Sarrià (en la calle Dolors Monserda). Allí se comenzó con el cultivo en macetas de Clavellinas, Hortensia (Hidrangeas s.p.), Crisantemo (Chrisanthemum s.p.), y plantas anuales para servir a los jardineros y mercados de plantas.

Este terreno se quedó pequeño y el mismo año se trasladaron a unos terrenos de alquiler en la calle Anglí. Allí se comenzó de nuevo y se ampliaron los cultivos y se iniciaron nuevos como el de Begonias de flor, Lantanas y otras plantas arbustivas y de floración en maceta.

En el año 1929, con motivo de la exposición universal de Barcelona, se cedieron muchas plantas para su decoración, así como un estand completo que le valió una medalla de oro y diploma por su calidad. Ese mismo año se adquirió un camión y se instaló un teléfono para mejorar la comercialización, siendo uno de los primeros establecimientos de este tipo con estos medios.

Fue en el año 1930 cuando se alquiló un terreno de 1.500m2 en la falda del Tibidabo, para dedicarlo al cultivo de Mimosas. La Guerra Civil interrumpió este proyecto. Estalló en el momento en que las plantas madre estaban listas para ser injertadas y el establecimiento estaba todo montado. Fue todo destruido.

Al finalizar la guerra, en el año 1939, se reanudaron los cultivos en los terrenos de la calle Anglí (de unos 8.000m2). Se dedicaron a producir Hortensias, Clavellinas, Crisantemos, Fucsias, Margarita de bola, Ciclamen, entre otras. Todo cultivado en macetas. También se producían plantas de umbráculo como Helechos y Esparragueras. También se hacían plantas anuales de primavera y otoño, en su mayoría plantadas en tierra.

En el año 1956, una gran helada destruyó una gran cantidad de plantas. Resultaron perjudicados, también, la mayoría de cultivos anuales. Y algunos de producción escalonada tuvieron que empezarse de nuevo, adquiriendo y aclimatando nuevas plantas madre.

El terreno, que era de alquiler y propiedad del municipio de Barcelona, se puso a la venta en el año 1956. El elevado precio hizo que se tomara la determinación de abrir un nuevo establecimiento en Sant Just Desvern, en un terreno en la carretera real. Con unas dimensiones de 2600m2 al principio, hasta llegar a los 5300m2, fue un terreno dedicado a la producción de planta y dejando para cultivo y venta los terrenos de Sarrià. Estos terrenos fueron siendo vendidos en parcelas, hasta quedar en 2.500m2 del vivero.

Debido a las inundaciones que sufrieron en el Vallès en los años 60, se creó un plan especial de ayudas a los damnificados, por lo que los terrenos de Sant Just fueron expropiados. Se tuvo que buscar un nuevo emplazamiento. El nuevo emplazamiento fue en un terreno en la falda de Collserola (dentro del término de Sant Just). Aunque no se construyeron las casas en los terrenos de la carretera real, se tuvieron que abandonar los terrenos.

El vivero Isart, por lo tanto, se quedó en el año 1976 con un terreno en Sant Just Desvern donde solo se hacía producción y venta a jardineros de la zona y con los terrenos de la calle Anglí para venta. En el año 1992 se trasladó todo a Sant Just debido a la venta definitiva de los terrenos de Sarrià.

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